Ei! Berriak

Ermua apela al civismo para evitar averías en las escaleras mecánicas

«Que las personas se suban o se sienten sobre los pasamanos provoca una sobrecarga que desajusta los rodillos y provoca ruidos y chirridos, además de fallos en el variador», explican

Los servicios municipales apelan al civismo

ERMUA | Responsables municipales ermuarras han apelado al civismo y al correcto uso de infraestructuras o mobiliario urbano como las rampas de Ongarai. En una nota destacana que no se están utilizando como se debieran  lo que acarrea averías o paradas recurrentes de la maquinaría y ello genera inconvenientes a las personas usuarias, además de un gasto extra. La misiva, publicada en el portal municipal ermua.es, detalla que “algunas personas se suben sobre los pasamanos o se apoyan sobre los zócalos, lo que genera un desgaste prematuro de elementos del mecanismo (rodillos, goma pasamanos, piezas de arrastre, etcétera…)”.

Explican que las  “personas se suban o se sienten sobre los pasamanos provoca una sobrecarga que desajusta los rodillos y provoca ruidos y chirridos, además de fallos en el variador. La rampa cuenta con dispositivos de seguridad que, si detectan cualquier anomalía como una sobrecarga, detienen el mecanismo para que evitar el sobrecalentamiento del variador o, incluso, su quema. Cuando los sistemas de seguridad de forma preventiva detienen la rampa es necesario que personal cualificado rearme el mecanismo y lo vuelva a poner en marcha. Ello no significa que esté averiada; sino parada por seguridad”.

Esas incidencias al ser reiteradas producen averías y hacen que las rampas estén paradas un tiempo indeterminado. Tiempo que depende del grado de la avería y de si hay o no pieza de recambio necesaria para la reparación. Los servicios de mantenimiento acuden diariamente a primera hora a las rampas para comprobar que todas están en funcionamiento. Si hay alguna parada o sin servicio, la rearman. En el caso que algún tramo no pueda ponerse en marcha, comunican la incidencia y comienzan a coordinar las tareas necesarias para solucionarlo. Las cabinas de los ascensores también presentan a menudo signos del maltrato que reciben: suciedad y daños en elementos como botoneras, luces o en las barras para agarrarse.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.